La fórmula mágica de Greenblatt
Ayer tocó desgranar, dentro de las reuniones periódicas que hacemos en el Club de Inversión, la famosa fórmula mágica descrita por Joel Greenblatt en su libro «El pequeño libro que (aún) bate al mercado«. Este es, sin duda, uno de mis libros favoritos sobre inversión y uno de los «obligados» a tratar dentro de las actividades formativas que desarrollamos. Lo que me gusta de este libro no es sólo que presente una fórmula de inversión fácil de implementar y capaz de generar rendimientos superiores al mercado, sino que también te enseña las líneas generales qué caracteriza a los buenos negocios. Es un libro, por lo tanto, estupendo, para «meter la patita» en el análisis fundamental, para aquellas personas que no dominan nada sobre la materia.
Greenblatt utiliza el ejemplo de una empresa que vende chicles dirigida por Jason, un amigo de su hijo. El negocio es muy sencillo: cada caja de 5 chicles le cuesta a Jason 0,25c, y cada chicle lo vende a 0,25c. Por lo tanto, la facturación por cada caja será de $1,25 y, como el coste de cada una de ellas era de 0,25c, su beneficio neto por cada caja será de $1.
Chico listo este Jason.
Greenblatt da un paso más allá y plantea que Jason hace crecer el negocio emitiendo un millón de acciones a $12 cada una. Es decir, una capitalización de $12 millones. Por otra parte, nos dice que su facturación alcanzó el año pasado los $10 millones, sus costes fueron de $6 millones y sus beneficios operativos, por lo tanto, llegaron a los $4 millones. Después de descontar los 2$millones de gastos generales y un oneroso 40% de impuesto de Sociedades — malditos impuestos — Jason obtuvo un Beneficio Neto de $1,2 millones.
¿Qué podemos ir aprendiendo de esta estructura de ingresos y gastos?.
Lo primero, podemos calcular cuántos beneficios obtiene por cada acción emitida (BPA o EPS en inglés), es decir $1,2 dólares. Pero podemos saber más: la rentabilidad que obtenemos. Si cada acción nos cuesta $12 y nos aporta $1,2, la rentabilidad que implica eso es de un 10%.
Ya sabemos que el negocio de Jason aporta un extraordinario 10% de rentabilidad, mucho más de lo que te aporta un bono del tesoro que Greenblatt — algo desfasado, aunque irrelevante en este caso para entender el concepto — sitúa en un 6%. Es decir, si un negocio no es capaz de generar más de un 6%, ¿para qué darle nuestro dinero a esa empresa?, mejor invertir en un Bono del Estado y obtendremos ese 6% sin asumir ningún riesgo (se supone que la Deuda de países, y más países como EEUU, no tiene riesgo).
Con este sencillo ejemplo, Greenblatt nos está acercando al primer elemento de su fórmula mágica: comprar empresas a precios de ganga, porque precios de ganga implica mayor rentabilidad por lo pagado.
¿El segundo elemento clave de la fórmula es encontrar buenos negocios. ¿Qué define a un buen negocio? Bueno, en principio pueden ser muchas cosas: calidad de productos, fidelidad consumidores, marcas, eficiencia en las operaciones, talento de la gestión, competidores, perspectivas del negocio. Todo esto es importante, pero también lo es la rentabilidad sobre el capital empleado. ¿Y qué es esto? Muy fácil, imaginemos que Jason, para generar $200 mil dólares de beneficio, necesita tiendas de chicles que cuestan $400 mil dólares. Dicho con otras palabras, para generar $200 mil dólares de beneficio, necesita emplear un capital de $400 mil. Esto, implica una rentabilidad sobre el capital empleado del 50%. Si con esos $400 apenas obtuviese $10 mil, sería una ruina. Estaría destinando una barbaridad de dinero para apenas ganar $10 mil míseros dólares.
Pues bien, altos retornos sobre el capital empleado, nos pueden estar alertando de buenos negocios, negocios capaces de generar muchos beneficios con relativo poco dinero empleado.
La fórmula mágica
Básicamente, esos son los dos elementos que integran la fórmula, y ya conocemos su fundamento: comprar empresas a buenos precios (para que la rentabilidad implícita sea atractiva) y que además sean buenos negocios (utilizando el retorno sobre el capital como proxi de «buen negocio»).
Ahora la clave es agregar ambas métricas y obtener una lista única de las empresas con la mejor combinación de ambas. ¿Y cómo lo plantea Greenblatt?. Muy sencillo, por un lado, se coge todo el universo de empresas americanas, le aplica algunos filtros para descartar, por ejemplo, empresas financieras que no le gustan, y las ordena (hace un ranking) de mayor a menor rentabilidad sobre capital empleado. Y por otro lado, hace lo mismo pero ahora ordenándolas por precios. Una vez obtiene ambas listas, a cada empresa le suma la posición obtenida en cada lista y construye una lista única con el resultado obtenido. Por ejemplo, imaginemos que Tesla en la lista de ROCEs está la número 150 y en la de precios ganga en la 576, pues su posición final será el 726. Y así con todas. De esta forma obtiene lo que acabamos de decir: una lista única donde las primeras posiciones en las empresas con mejor combinación de «altos retornos sobre el capital» y «precios ganga». Ya está. Así de simple. Ahora lo que toca es comprar las empresas mejor situadas y construir una cartera de unas 20-30 posiciones.
Este proceso de ranking y agregación sólo hay que hacerlo una vez al año. Una vez lo hacemos, vendemos las posiciones que hayan perdido su estatus dentro del top 20 o top 30 y compramos aquellas que ahora ocupen dicha posición.
Pues bien, los resultados de esta fórmula han sido extraordinarios. En la siguiente tabla, se muestran los rendimientos desde 1988 hasta 2004 (ofrecidos por el propio Greenblatt) y en la imagen de al lado, la evolución de la rentabilidad desde 2005 hasta nuestros días.
Aplicación de la fórmula
Aunque existen screeners donde uno puede generar la fórmula e incluso añadirle las variaciones que uno considere oportuno, el propio Greenblatt ha creado una página web absolutamente gratuita donde ofrece la lista actualizada de las empresas TOP rankeadas por su fórmula. Esa web es https://www.magicformulainvesting.com/. Para un particular, construir una estrategia de unversión basada en la fórmula mágica de Greenblatt es tan sencillo como acudir a esta web, listar las empresas en función del mínimo de capitalización bursátil que desees y comprar las 20 o 30 mejor situadas. Al año, volver a este sitio y repetir el proceso. Tan sencillo como eso. El futuro es incierto y desconocemos si la fórmula mágica ofrecerá unos rendimientos tan extraordinarios por encima del mercado, pero lo que sí parece probable es que, aún no consiguiéndolo, ofrezca rendimientos positivos lo que, para un particular que disfrute con la auto gestión de sus inversiones, debería ser más que suficiente.
Saludos e intentado comunicarme pero no llegan los correos yo estuve en el seminario gratuito de finanzas
Excelente info, gracias por el aporte permanente. Saludos desde Argentina
y que porcentaje se le debe asignar a cada empresa seleccionada? todas por igual o deben haber algunas mayor ponderadas?
Estimado Enrique, compre tu libro sobre el metodo wycoff en amazon, y me parecio muy entretenido, te felicito. Me quede con una duda, en que plataforma de graficos recomiendas ver el volumen, yo uso tradingview, pero no se si es la mas adecuada.
gracias